Una costumbre para el amor

Día 91                              

Lectura: Fuentes, Carlos: Las buenas conciencias. México,
Planeta DeAngostini (Colección Carlos Fuentes), 2002.

Los usos y costumbres de cada región son muy ricos e interesantes. Así como actualmente los jóvenes y no tan jóvenes salen al cine, el antro o a la plaza para conocer y ver a las chicas y chicos solteros de la zona, en otros tiempos estos no era así:

 “[…] Rodolfo ya la había visto en diversas ocasiones, durante la serenata que, tres veces por semana, tenía lugar en el Jardín de la Unión. Los hombres caminaban en una dirección y las mujeres en la opuesta. […]” (p.37)

En otros tiempos las cosas eran diferentes. Por ejemplo, recuerdo que me decía mi abuelita que no era bien visto que una mujer saliera sola a la calle, ni las esposas. El único lugar en donde podían asistir sin problemas, porque se trataba un acto de fe y no de ligereza, era a la iglesia, y por supuesto hablar con el padre, no implicaba un peca sino un gesto de santidad.

Así que la única oportunidad que tenían las chicas y chicos solteras para conocer a gente de su edad, era en la iglesia o en el jardín del centro del municipio, regularmente alrededor de la fuente, en los días de descanso. Se caminaba en círculo, las mujeres para un lado, y los hombres para el otro. Así que cada vez que daban la vuelta veían de frente al sexo opuesto.

Que padre ha de haber sido esto. Que si no mal recuerdo escuché en alguna plática que en alguna costa, creo Veracruz, se hace este ritual aún. Si tu sabes de alguno, me encantaría que lo platicas, y más si era o es para encontrar el amor.