Día 365+173
Comentando lo que me despierta la
lectura de:
De Beauvoir, Simone: El Segundo Sexo. México,
Random House Mondadori (Debolsillo), 2013.
De Beauvoir, Simone: El Segundo Sexo. México,
Random House Mondadori (Debolsillo), 2013.
En estos tiempos en México, como en muchas otras partes
del mundo, la situación económica, política y social está complicada para la
mayoría de sus habitantes, niños, jóvenes, adultos y ancianos. Pero si
prestamos atención específicamente al caso de las mujeres, nos daremos cuenta
que para muchas esta crisis es aún mayor, ¿por qué? Por el sólo hecho de ser
mujeres, y tener que cumplir con el rol que socialmente se les impone.
“[…] sí, las mujeres,
en conjunto, son hoy inferiores a los hombres, es decir que su situación les
ofrece menos posibilidades: el problema cosiste en saber si semejante estado de
cosas debe perpetuarse." (p. 26)
Muchas
mujeres están sujetas económica y/o socialmente a los demás, no sólo sus
parejas, sino a padres, hermanos, amigos, porque en el momento en el que se les
brinda menos oportunidades de trabajo, o de desarrollarse académica y
socialmente, se encuentran, como se dice comúnmente, atadas de manos.
Por
ejemplo, pensemos en una joven mujer de 17 años, con dos hijos, sin estudios ni
posibilidades de trabajar porque no tiene quien vea por sus hijos, ¿tiene las
mismas posibilidades que un hombre, de la misma edad, pero sin todas estas
detonantes, para poder ser libre e independiente? La respuesta es clara: por
supuesto que no. ¿Qué opinan? [1]
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