Día 365+105
Comentando lo que me despierta la lectura de:
Dostoievski, Fedor: El Jugador. (Traducción del Ruso: José Jaín Entralgo) España, Biblioteca Básica Salvat, 1969.
Dostoievski, Fedor: El Jugador. (Traducción del Ruso: José Jaín Entralgo) España, Biblioteca Básica Salvat, 1969.
¿Para que usamos el dinero? Para cambiarlo por artículos de
necesidades básicas, como alimentos; y no básica, que bien podría ser ropa,
maquillaje, juguetes, etc. El dinero se ocupa prácticamente para hacer
cualquier tipo de trueque, aunque en algunos lugares, mayormente de la
provincia, podemos encontrar aún intercambios en especie, es especial en los días
de mercado.
“ […] Todo esto fue, naturalmente, un desvarío y una estupidez
Estuve allí poco más de tres semanas y en este tiempo desaparecieron por
completo mis cien mil francos.[…]” (p.167)
Pero una cosa es adquirir lo verdaderamente necesario a
despilfarrar el dinero. Por ejemplo, pensamos en alguien, como el caso de la
cita, que en cuestión de semanas, días y horas es capaz de gastar una suma
exagerada en algunos artículos que no son necesarios. Como el caso del alto
funcionario, si no mal recuerdo fue el expresidente de la República Mexicana,
Vicente Fox, que gastó no se cuento en unas toallas.
No estoy en contra del consumismo, porque sería mentirosa e hipócrita al decir
que no lo hago, pero siempre y cuando sea de manera moderada y consciente.[1]
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